Lerma
Conocimos Lerma con los niños en nuestro primer viaje por carretera a Paris y a Eurodisney, es una parada perfecta para hacer siempre que se recorra la autovia A1 entre Madrid y Burgos.
Lerma es un pueblo de la provincia de Burgos a unas dos horas de Madrid en coche, ideal para una primera parada cuando vamos con niños pequeños por carretera. Es una villa ducal y tiene un casco antiguo bonito para pasear y disfrutar de las vistas. Ha sido catalogado también como uno de los pueblos más bonitos de España.
La localización de Lerma, en lo alto de un cerro, encrucijada de caminos, desde donde se domina el rio Arlanza, ha sido aprovechada desde hace siglos por todos los pueblos que han habitado estas tierras.
Los vacceos, una tribu celtibérica, ya habitaban aquí desde antes de la dominación romana. Después del largo periodo romano llegaron los suevos, los visigodos, los árabes y la reconquista cristiana. Su momento de esplendor vino en el s. XVII de la mano de Francisco Sandoval y Rojas, primer duque de Lerma.
Durante el breve periodo en el que Valladolid fue capital de España, se dice que Lerma fue a Valladolid lo que El Escorial a Madrid, esto es, una nueva corte donde la nobleza de la época y su rey pasaban largas temporadas dedicados a cazar, realizar suntuosas fiestas y tomar decisiones políticas.
¿Qué ver en lerma?
1.- Palacio Ducal
Actualmente es un Parador Nacional de Turismo. Está ampliamente restaurado. Fue el símbolo de poder del primer duque de Lerma, lo mandó construir al estilo herreriano. Para su construcción se aprovechó el antiguo castillo de origen medieval y se le integró dentro del conjunto palacial.
El Palacio tiene 210 balcones de hierro y 135 ventanas. Su patio central rodeado de galerías con columnas invita a sentarse y descansar tomando un café o un refresco, es espectacular y merece la pena la experiencia.
La Plaza Ducal donde se encuentra el parador y antiguo palacio, tuvo varios usos a lo largo del tiempo, entre otros corral de comedia de la que Lope de Vega quedó prendado.
2.- Plaza de Santa Clara
Apenas a unos metros de la Plaza Ducal de Lerma se encuentran uno de los lugares imprescindibles de nuestra visita a Lerma, el mirador de los Arcos, ofrece unas vistas espectaculares del rio Arlanza que no nos dejaran indiferentes.
En esta plaza encontramos también el sepulcro de un famoso guerrillero de la Guerra de Independencia, el cura merino. Fue un sacerdote y destacadísimo líder guerrillero español, se cuenta que de él Napoleón dijo: «prefiero la cabeza de este cura a la conquista de cinco ciudades españolas», muestra de su desempeño contra el invasor francés.
3.- Colegiata de San Pedro
Está situada en la Plaza de Santa Clara. Fue construida en el s. XVII. En su momento, aunque nos parezca sencilla, llegó a ser una abadía dependiente de Roma. Solo se puede acceder a su interior si haces la visita guiada que organiza la oficina de Turismo de Lerma.
4.- Arco de la Cárcel
En la época de la reconquista había cuatro puertas de acceso a la ciudad, lamentablemente solo una ha llegado hasta nuestros días. Fue remodelada en el s. XVII añadiéndole un cuerpo de ladrillo para servir de cárcel, de ahí su nombre. Es un un lugar ideal donde comenzar nuestra visita a Lerma.
5.- Convento de San Blas
Al igual que la mayor parte del Lerma histórico que ha llegado a nuestros días, el convento de San Blas fue mandado construir por el Duque de Lerma en el s. XVII para albergar la Orden de los Dominicos. Su arquitecto fue el mismo que el Palacio Ducal con el que estuvo unido por un pasadizo volado de tres arcos hasta el s. XIX. Actualmente está habitado por monjas dominicas de clausura que realizan piezas de cerámica de muy buena calidad.
En Lerma hay un total de dos monasterios y tres conventos, muestra de la importancia que tuvo la villa. Algunos extramuros y en estado de abandono. El de Santa Teresa, antiguamente ocupado por frailes carmelitas, hoy en día alberga parte del ayuntamiento y la oficina de turismo.
6.- Pasadizo del Duque
Este pasadizo se construyó para que el Duque, el Rey Felipe III y demás cortesanos o allegados que lo merecieran, pudieran desplazarse a los distintos oficios sin pisar la vía pública, comunicando el Palacio Ducal con las iglesias y conventos de la localidad.
Actualmente solo hay un tramo visitable y es la unión de los Monasterios de Sta. Teresa y Sta. Clara en el mirador de los Arcos. Aquí encontraremos expuesto de una forma bastante didáctica los pormenores de la vida del Duque, su ascenso, su esplendor y su decadencia. Su oscuro final estuvo asociado a una supuesta corrupción muy comparable a los casos de corrupción inmobiliaria, recalificaciones dudosas y tráfico de influencias que salpican hoy en día las portadas de cualquier periódico en cualquier país, pasan los siglos pero lamentablemente hay costumbres que parecen no cambiar.
¿Sabías qué? Francisco Sandoval y Rojas
Francisco de Sandoval y Rojas, primer duque de Lerma, fue el hombre más poderoso durante el reinado de Felipe III (sucesor de Felipe II y Ana de Austria). Gracias a este ilustre vallisoletano tenemos el monumental Lerma actual. Fue el hombre de más confianza del monarca y fue bajo su influencia que el rey trasladase la corte desde Madrid a Valladolid.
Acabó haciéndose cardenal, en busca de inmunidad ante acusaciones muy graves de corrupción. En su época de él se dijo: «Para no morir ahorcado, el mayor ladrón de España, se viste de colorado», acabó retirado de la vida pública y su fama de corrupto le ha perseguido desde hace cuatro siglos. Hay historiadores que discuten esta fama atribuyendo las acusaciones a una conspiración en su contra por parte de su hijo (que estaba deseando sustituirle), una trama política para impedir que Galicia consiguiera voto en las cortes y un largo etcétera de intereses cruzados.
¿Sabías qué? Lope de Vega
Al ilustre Lope de Vega le gustó tanto Lerma que escribió una obra inspirada en la villa ducal, una comedia que llevaba de título «la burgalesa de Lerma».
A tener en cuenta
Nosotros hemos parado varias veces en Lerma de camino a Europa, siempre intentamos organizarnos para parar cada dos horas en algún sitio que merezca la pena y aprovechar la parada, pero Lerma tiene mucho que ofrecer. A parte de rutas de senderismo muy interesantes, Lerma está apenas a media hora de Santo Domingo de Silos, por ejemplo, y a un paso de Burgos capital. Lerma es una población a tener muy en cuenta para una escapada de un par de días y conocerla sin prisas.
