Burdeos es una ciudad cómoda, paseable y muy bella. Una parada obligada si nos estamos adentrando en Francia por carretera. Tanto si vamos en dirección a Paris, Los Castillos del Loira, Bretaña o Normandía, Burdeos es ideal para hacer noche en ella y conocerla con calma. Con dos días completos dedicados a patear la ciudad a buen ritmo podremos hacer las visitas más relevantes.
Se cree que Burdeos fue fundada en el s. III a. C por un pueblo galo que se instaló en esta zona del rio Garona para controlar el comercio de estaño que provenía de las Islas Británicas y en general todo tipo de comercio proveniente del noreste francés (lo que en la antigüedad se llamaba Armórica).
La historia de Burdeos es rica en anécdotas e intensa en personajes y sucesos. Cambió muchas veces de manos y fisionomía. Asaltada por los árabes en el año 732, los vikingos la arrasaron completamente en el año 848, fue asediada por Alfonso VIII de Castilla en el s. XII, a partir de este intento castellano fue cuando los bordoleses se constituyeron en comunidad autónoma en 1199. Durante siglos perteneció a Inglaterra, fue anexada a Francia dos veces, en 1453 y definitivamente en 1653 cuando el ejército de Luis XIV entra en la ciudad. Revueltas populares por una mayor democracia y cambios de poder han sido constantes en su historia.
Ahora se conoce a Burdeos como la Perla de Aquitania, pero hasta hace no mucho se la llamaba La Bella Durmiente por lo poco resaltado que estaba su patrimonio histórico. Fue a principios del s. XXI cuando Burdeos recupera su esplendor y consigue que una parte de ella sea nombrada Patrimonio de la Humanidad.
Durante la I Guerra Mundial el gobierno de Francia se retiró de Paris a Burdeos, al estar la capital amenazada por el ejército alemán. Durante la II Guerra Mundial, antes de Francia ser derrotada, el gobierno del país galo también estuvo brevemente establecido en Burdeos.
¿Qué ver en Burdeos?
1.- Place de la Bourse y Miroir d’eau de Bordeaux
La Plaza de la Bolsa, en español, fue construida entre los años 1730 y 1775. Como curiosidad decir que fue la primera brecha que abrió en el as murallas medievales de la ciudad. Cambió varias veces de nombre y se acabó llamando definitivamente Plaza de la Bolsa en 1848.
Dentro de la plaza, tenemos una oficina de turismo (buena parada para recoger información en nuestra visita a Burdeos), también tenemos el Museo Nacional de Aduanas y la Cámara de Comercio e Industria de Burdeos.
Miroir d’eau
La piscina que nos encontramos enfrente de la Plaza de la Bolsa tiene 3450 m2 y 2 cm de profundidad, está abierta al público todo el año de 10 am a 10 pm (salvo en tiempos de pandemia). Tiene diferentes acciones como neblinas, chorros de agua pulverizada y el reflejo habitual de la plaza. Si vas acompañado de niños a Burdeos les encantará corretear, mojarse y jugar con el agua, eso sí, una vez empiecen a jugar, costará sacarlos.
2.- Catedral de Saint Andre y la torre de Pey-Berland
La catedral de San Andrés de Burdeos es una catedral de estilo gótico Patrimonio de la Humanidad dentro del conjunto «Caminos de Santiago de Compostela en Francia». Tiene origen románico, se empezó a construir a finales del s. XI.
De la construcción románica original apenas quedan unos muros interiores y lo que podemos ver ahora son reconstrucciones hechas entre el s. XII y s. XVI. Según una antigua crónica inglesa de 1535 en aquella época dentro de la catedral se encontraban los más grandes y bellos órganos de la cristiandad, lamentablemente los originales se perdieron para siempre y el órgano actual es de 1982.
La torre Pey-Berland situada junto a la catedral es una de las atracciones más visitadas de la ciudad y desde ella se pueden ver las mejores vistas de Burdeos. Se construyó separada de la catedral para proteger a la misma de las vibraciones provocada por las campanas al tañer. Una vez terminada su construcción en el 1500 d.C. y por falta de presupuesto no se acabaron colocando las campanas hasta el año 1851.
3.- Pont de Pierre
Fue el primer puente de piedra construido sobre el Garona entre 1810 y 1822 por orden de Napoleón. Consta de 17 de arcos, y el número no obedece a una cuestión pura de ingeniería, sino que corresponde el número de letras del nombre de Napoleón Bonaparte. Fue el único puente con el que contaba la ciudad hasta la construcción del puente de San Juan en 1965.
4.- Ópera nacional de Burdeos – Gran Teatro
El Gran Teatro de Burdeos fue inaugurado en 1780 tras el incendio del anterior en 1755, fue mandado construir por el mariscal Richelieu, sobrino nieto del famosísimo cardenal. La sala de espectáculo es increíblemente bonita y merece una visita, o si es posible, disfrutar de alguna representación. Es considerado por muchos el más importante de toda Francia.
5.- Grosse Cloche
Es uno de los campanarios más antiguos de Francia y uno de los pocos restos que quedan de las antiguas murallas medievales de la ciudad. Las campanas de este antiguo campanario han marcado la vida de la Perla de Aquitania desde s. XIII. Fue utilizada como prisión y sus mazmorras son visitables.
6.- Iglesia de San Michel «La Fleche»
Construida entre los s. XIV y XVI comparte con la catedral de la ciudad la peculiaridad de tener el campanario independiente del santuario, con una altura de 114 metros se considera una de las más altas del sur de Francia.
Es famosa por las momias perfectamente conservadas que se encontraron en la cripta situada bajo el campanario, se descubrieron durante los movimientos de tierra del antiguo cementerio parroquial en 1791. En 1979 las momias fueron retiradas de la cripta y nuevamente enterradas en un cementerio cercano.
7.- Monument aux Girondins y la Place des Quinconces
Una de las plazas más grandes de Europa con una superficie aproximada de 126.000 m2. El monumento principal fue erigido en 1902 en memoria de los girondinos (grupo político de la época de la revolución), que fueron perseguidos durante la Revolución Francesa.
Actualmente la plaza es el centro de transporte público más importante de la zona.
8.- Porte Cailhau
Ha permanecido prácticamente inalterable desde el año 1494. Conmemora la victoria de Carlos VIII de Francia en la batalla de Fornovo (Italia). La Puerta del Cailhau tiene 35 metros de altura y en su interior se encuentra una exposición con herramientas y materiales utilizados para construir la ciudad. El origen de su nombre es desconocido.
9.- La Cité Du Vin
Una visita diferente, un edificio único. No hay duda que la cultura del vino ha desarrollado espacios singulares por todo el planeta, desde bodegas de diseño al más alto nivel a museos de todo tipo. Burdeos no podía fallar en tener un museo del vino de referencia.
Inaugurado en el año 2016 La Cité du Vin es un lugar cultural único en el mundo, que te permite conocer el vino de una forma diferente, sumergiéndote en su historia a través de diferentes culturas y civilizaciones.
En casa no solemos beber vino, a mi me encanta probar diferentes sabores, pero no suelo acabar una copa entera. Nosotros visitamos el edificio por fuera, pero no llegamos a entrar, lo tengo pendiente para nuestra próxima visita a Burdeos. Me apetece mucho disfrutar de la experiencia de un museo así.
10.- Palais Rohan
El ayuntamiento de Burdeos está situado en un bello edificio construido entre 1771 y 1784 que originalmente fue el Palacio Arzobispal de Burdeos. Precioso en su exterior, monumental en sus dimensiones.
Curiosidades Burdeos
¿Sabías qué? Producción de vino
Se cree que las primeras viñas que dieron renombre internacional a la ciudad fueron plantadas en el año 30 d.C. Durante la dominación inglesa de Burdeos la industria del vino alcanzo un esplendor sin igual, marcando el año 1307 un récord absoluto de producción en tonelaje, ¡récord que no fue superado hasta el año 1950!
Se dice que Inglaterra empezó a ser una potencia marítima gracias a la construcción de convoyes destinados a la exportación de vino con origen Burdeos.
¿Sabías qué? Ricardo Corazón de León
Burdeos siempre fue un importante puerto marítimo. De hecho uno de los nombres por el que se conoce popularmente a Burdeos es Puerto de la Luna (por la forma de cruasán que presenta el meandro del estuario marítimo formado por el río Garona a su paso por la ciudad). Fue Ricardo Corazón de León en el s. XII quien añadió la forma creciente de Luna al escudo de la ciudad y se mantuvo en su forma definitiva adoptada en el s. XVIII.
¿Sabías qué? Base de submarinos de guerra italianos
La Regia Marina Italiana estableció una base de submarinos en Burdeos durante la II Guerra Mundial que es visitable hoy en día. Fue construida entre otros trabajadores forzados por republicanos españoles exiliados en Francia. En la actualidad está abierta al público como lugar de eventos de artes escénicas, exposiciones y acontecimientos nocturnos. Un pedazo de historia viva interesante para las aficionados a la II Guerra Mundial.
¿Sabías qué? puerto esclavista
El puerto de Burdeos llegó a ser el primero de Francia y el segundo del mundo gracias principalmente a los bienes producidos por los esclavos en las colonias y la misma trata de esclavos en el s. XVIII. Todo, evidentemente debía pasar por aduanas y el Museo Nacional de Aduanas nos narra desde una perspectiva diferente la historia de Francia.
¿Sabias qué? Goya
Goya abandonó España en 1824, ya anciano, huyendo de las persecuciones contra los liberales y se instaló en Burdeos. Durante los últimos años de su vida no paró de pintar hasta que falleció en 1828 lejos de su patria. Una estatua realizada por el escultor Mariano Benlliore (mismo autor que la estatua de Goya que se encuentra frente al museo del Prado) se encuentra junto a la iglesia de Notre-Dame du-Chapelet en la Perla de Aquitania.
